PREMIOS CLAUSURA 2014
Para el cierre de un torneo raro, números raros para definir los
premios de este Clausura 2014 que, por las lluvias, se nos fue rápido, como se
iría un eyaculador precoz si se la estuviera mamando Scarlett Johansson. Se
jugaron sólo 7 partidos para no terminar jugando en nochebuena y la cuestión es
que obviamente las cifras servirán de poco para compararse con los otros
torneos. Para empezar, no se puede tomar como referencia la cantidad de puntos
obtenidos para hacer un balance. Aunque sí la efectividad. De los 8 torneos que
se jugaron, con el 33,33% que se obtuvo en este semestre, se alcanzó el 5to
puesto (el mejor es el Apertura 2011 con el 46.15%). También la cantidad
de jugadores utilizada está directamente atravesada por la menor cantidad de
encuentros. Pero lo cierto es que sólo se utilizaron 16 jugadores, la marca más
baja de la historia aufwiedersehiana. Este es un dato que marca un poco el compromiso
del grupo. Quizá por eso, más allá que desde los puntos no resultó brillante la
campaña, la continuidad de los jugadores y algún que otro momento de buen
fútbol despertaron alguna ilusión o por lo menos permitió que no se sufriesen la
falta de jugadores para completar los once y otras cuestiones que exceden al
juego en sí. Pero para dejar de boludear y de tirar datos (¡Que lujo, por
Dios!) vamos directamente a la entrega de las estatuillas.
PREMIO MARTIN PALERMO (Goleador del equipo):
Luis Lasaga, Ernesto
Rodríguez, Alejo Canessa, Guillermo Gardeazábal, Rubén Guerrero e Ignacio
D'Aquila.
Si hay algo a lo que le tiene terror el cronista y
estadista (porque lleva las estadísticas) del Olvidensen es a los premios
compartidos. Porque, como acostumbra en todas las ediciones, debe dejar una
reseña de cada uno de los ganadores. En este caso, parece que los goleadores se
complotaron para hacerle ardua la labor al pibe que escribe. Si en el último
partido Luis Lasaga le hubiera dado fuerte después de enganchar. Si la de Rubén
Guerrero hubiera entrado tras pegar en el palo. Si Ignacio D'Aquila no hubiera
errado el penal. Si Guillermo Gardeazábal hubiera podido jugar un par de
partidos más. Si Alejo Canessa hubiera jugado más adelantado en el terreno. Si
Ernesto Rodríguez hubiera tenido 20 mano a mano más. En fin. Con otro golcito,
alguno de ellos se podría haber llevado el premio en solitario y se podrían
haber gastado menos líneas. Pero no. En este caso, será difícil comparar con
los otros torneos, porque, obviamente se trata de la menor marca para un
goleador de campeonato, pero se tuvieron menos partidos para convertir.
PREMIO MAURO LASPADA (El que más tarjetas recibió):
Alejandro D'Aquila.
¿Pudo haberlo dejado el esquema de juego un poco más
expuesto? ¿Fue porque el mediocampo no agarraba a nadie? ¿Tendrá algo que ver
la rapada involuntaria que le propinó Lichi? ¿Habrá sido la ira canalizada retroactivamente
por el descenso de Independiente? ¿Será porque bajó la producción de potus en
el invernadero de CETEC? Lo cierto es que Alejandro D'Aquila pegó en este
torneo como pocas veces. En este caso, por la cantidad de tarjetas recibidas,
sí pareció un torneo largo. El muchacho que juega con rodillera acumuló 4
amarillas y 2 rojas ¡en sólo 6 partidos! Toda una proeza. Las rojas fueron en
la 4ta fecha por una un intento de golpe (¿o le llegó a pegar al
delantero?) y en la 6ta, por un cruce de último recurso que
quedará en el recuerdo. Y las amarillas fueron por patadas comunes que sólo le
dejaron algunos raspones a los contrincantes.
PREMIO JAVIER ZANETTI (El que más partidos jugó):
Fernando Carro,
Gabriel Spina, Alejandro D'Aquila, Alejandro Encisa, Hernán Colombino, Gabriel
Di Giovanni y Ezequiel Avillaneda
La prueba de lo que se escribía anteriormente. En
todos los partidos hubo, aunque sea, un suplente. Y en varios, hasta fueron a
ver los que no estaban en condiciones de jugar. Desde ese punto de vista, el
saldo del torneo es muy positivo. Pero los que están en negrita más arriba
fueron los que más jugaron en el Clausura 2014. Todos llegaron a los 6 encuentros.
El dato destacable de la finalización de este torneo se lo lleva Alejandro
D'Aquila. Por el SIDA de espalda (según diagnosticó Lichi) que sufre Nacho y
sólo le permitió jugar en 3 ocasiones, su hermano lo pasó en la tabla histórica
de partidos. Llegó a 88 y el Capitán Cula quedó en 87, bajando por primera vez
a la 2da posición. Pero no fue el único que tuvo asistencia perfecta
en este mini torneo. Hernán Colombino, compañero de Aleja en el laburo, se
comprometió y cumplió, y hasta tuvo una recuperación supersónica de un golpazo
que le dieron en la rodilla. Fernando Carro (sólo había jugado 2 partidos en el
Apertura 2012) y Gabriel Di Giovanni (dejó pasar el Apertura 2014) volvieron y
no para cubrir huecos, sino ocuparon varios lugares dentro de la cancha y
sumaron. Lo de Gabriel Spina ya es cosa seria. Jugó su 5to torneo
consecutivo y se asentó en el top ten de más presencias (subió del 10mo
al 9no puesto). El 5 raspador fue quien trajo a Alejandro Encisa, el
1, que debutó en el torneo anterior y en este no faltó nunca. Por su parte,
Ezequiel Avillaneda obtuvo por segunda vez este reconocimiento y pasó la
barrera de los 50 partidos.
PREMIO JUAN ROMAN RIQUELME (El que más asistencias dio):
Gabriel Di Giovanni.
En este rubro la cosa sí que estuvo triste. En los 6
tantos que se marcaron, sólo en uno hubo una asistencia clara. Y fue el centro
que le puso Gabi, desde la izquierda a Tito, para que la empalme y le defina
abajo al arquero (3ra fecha). El resto fueron jugadas individuales o
fruto de algún rebote. Así, con poco, el muchacho que mete 15 llamadas (vaya
uno a saber a quién) después de los partidos se alza con el trofeíllo de este
baluarte del ascenso que busca retornar a Primera.
PREMIO DIEGO MARADONA (El que mejor promedio de puntos tuvo): Fernando Carro
Los rulos del Diego los tiene en
el pecho y no en la cabeza. Pero lo cierto es que Fernando Carro se lleva
merecidamente este diploma, que ya fue entregado varias veces a rústicos
defensores. Alcanzó un promedio de 6,08 en los 6 partidos que disputó. A fuerza
de empuje, garra, patadas y cada tanto un pase al compañero, el crédito de
Llavallol terminó siendo lo mejorcito de un equipo que tuvo algunos buenos
momentos. Jugó de 4, de 5 y de central y nunca bajó su rendimiento. Es más,
aunque a veces llegó sin dormir, fue tomando ritmo de juego y cada vez estuvo
más intenso. Resultó figura en las 2 últimas fechas.
Con respecto al equipo, el mejor promedio general se
dio en la victoria de la 3ra fecha. Los 13 pibes que jugaron
promediaron 6, 15. ¿El peor encuentro? En la derrota 4 a 0 de la 6ta jornada
entre los 12 participantes se alcanzó un puntaje de 4,17.




