Se podría decir que el partido del último sábado del Auf Wiedersehen
fue una muestra de todo lo que pasó en el torneo. Por momentos jugó bien, por momentos
desordenado, no tuvo suerte y al primer golpe perdió la cabeza.
El comienzo del partido fue auspicioso para los del escudo de la
muelte. Rápidos y coordinados en ataque
de la mano del CC, firmes en defensa, que tuvo al debutante Fernando Carro como
principal estandarte.Con el
El segundo tiempo presentaba un escenario ideal para aprovechar la velocidad de los de arriba y el juego sutil de los del medio. Pero un error en ataque facilitó una contra, y como todos los errores en este campeonato, se pagó con gol. Y como con todos los goles sufridos en contra, se quemaron los papeles. Hubo desorden y desesperación. Y encima, la suerte, siempre esquiva, jugó su parte: rebote y pifia en área propia, gol rival; definición por encima del arquero en área contraria, pica y se va por arriba del travesaño.
El partido se terminaba con el Olvidensen apretando, pero sin precisión en los metros finales. Con la entrada de Lasarga para los minutos finales (se pasó a jugar con una línea de tres que obliga a ser tomada en cuenta) llegó la jugada del empate: pelota en profundidad, falta del delantero sobre el defensor que chocó con el arquero, dejando la pelota indefensa para que el lungo delantero le diera el pase a la red.
El empate dejó la sensación de que en este campeonato, que termina el próxima sábado, ganar ha sido casi siempre una misión imposible. Pero también ha sido difícil para los rivales doblegar a este férreo equipo que, cuando pueda sacarse algunos traumas de encima, va a rendir mucho más.
Luis Damián Forlani (6): Inesperado
refuerzo para las últimas dos fechas, se cargó la responsabilidad y se convirtió
en el quinto arquero del Auf en el campeonato.
Los guantes le quedaban grandes, pero achicó el arco. Casi saca el mano a mano imposible del primer
gol, no tuvo responsabilidad en el segundo.
Sorprendió con su juego con los pies, dando pase precisos, aunque tal
vez se apuró en alguna salida. Su
hilacha de rugbier se dejó ver en alguna salidas humeantes yendo al piso, sin
rivales a la vista.
Fernando José Carro (7): Otro
flamante refuerzo que la rompió. Por
imposibilidades laborales, no había podido estar antes. Pero compensó la espera con una actuación
destacable. Clausuró la banda derecha,
salió con criterio y reventó cuando fue necesario. Quizás el punto negativo fue la cantidad de
faltas cometidas. Salió en el segundo tiempo por su larga inactividad (jugó
después de seis meses) y para evitar una probable doble amarilla.
Patricio Monti “Burns” (6):
“El heredero del Alva” brindó otra de sus sobrias actuaciones. Bien de arriba y de abajo, va a tener que
asumir el rol de último hombre: en el primer gol rival la defensa marcó en
línea y no salió al momento del pase, habilitando al delantero pero no llegando
al cierre.
Francisco “Hernán” Pikín (6):
El protegido del DT también jugó uno de sus típicos partidos, con marca y
elegante. Se deschavetó después de los goles rivales. Dado que es una falla de todo el equipo, se
espera de él que no pierda la cabeza y dé el ejemplo.
Ezequiel “Mono” Avillaneda (5.5):
Bien de tres, completó un partido un partido luego de ocho meses. Bien de tres, no tuvo problemas en la
marca. Fue claro en la salida, pero no
pasaba tres cuartos de cancha aunque la jugada lo pidiera y si recibía un pase
atrás para poder continuar la jugada de ataque más limpia, sacaba enseguida un
centro de primera que en general no servía para nada.
Juan “Vladimir Gorishnikov” (4.5):
No sintió nunca la posición de 8. No se
integró en los circuitos de ataque y tampoco pudo recuperar demasiado en
defensa.
Alejandro “Macarnei” D’Aquila (6.5): Recuperó muchísimo en el que fue uno de sus mejores partidos como número cinco. Asistió a Lasaga en el mano a mano increíble que se perdió, a CC en la pelota que no entró por poco y a Abud en una muy buena jugada que no terminó en gol por casi nada. Hubiese sido figura con un punto más, pero cometió el error que lo persigue desde la primera vez que se puso la cinco: con el equipo volcado en ataque, tiró un taco para evitar que la pelota se fuera al lateral. Directo a los pies de un rival, con la mala suerte de que habilitó como si fuese Riquelme y definió como si fuese Cruyff.
Juan Manuel “Abut” (5.5): Cuando
se sincronizó con Aleha, el mediocampo funcionó. Cuando eso no sucedió, la defensa veía venir
a los rivales como por autopista. En
ataque lo buscaron poco, y sufrió la mala mañana de Noriega. Así y todo tuvo el 3 a 2 en sus pies después de
una gran jugada que no alcanzó a definir.
Leandro “Cabo” Noriega (4): Tuvo
uno de sus peores partidos en el equipo.
Pases fallados, pelotas perdidas.
Pero la razón por la que permanentemente quedaba en foco era porque la
seguía pidiendo. Da la sensación de que
cuando él juegue de bien para arriba, al equipo no le va a quedar otra opción
que ganar.
Ignacio “CC” D’Aquila (7): Después
de varios “chiclecitos” y pases cortos, llegó la gran jugada del primer gol: recibió
sobre una banda, aguantó a un defensor, gambeteó entre dos y cuando enganchaba
al último para pegarle al arco (que por todo lo que sabemos podía terminar en
el campo), lo trabaron. Agarró el penal
con la autoridad a lo que lo obliga la cinta, pero no le pegó como practicó
hace dos sábados. Fuerte y casi al
medio, tuvo la fortuna de que el arquero eligió el otro lado. En el segundo tiempo espero siempre
habilitado con la defensa de ellos jugando en línea y muy adelantados, pero los
pases fueron imprecisos. Y cuando por
fin llegó uno, entre la mitad y el área definió bien y rápido por encima de un
arquero que salía bien. Picó a un metro
de la línea y se fue por arriba del travesaño.
Cuando el partido se puso áspero, atendió al chiquitito rival que la
pisaba y al número tres. Ah, Lasaga
confirmó que remató a gol cuando escuchó el grito desaforado de CC desde atrás.
Luis “Martilleta Lasarga” (6):
Cada vez mejor físicamente, tuvo un mano a mano en primer tiempo en el que
demoró una eternidad. Jugó bien, tocando
y haciendo la personal. En el segundo
tiempo, descanso de por medio, tuvo la chance que merecía por voluntad y no la
dejó pasar.
Ariel “Pani” Pina (5.5): Cumplió,
como casi siempre. Recuperado casi
enteramente de la lesión que lo marginó el partido anterior, hizo lo que mejor
hace, que es anticipar. También colabora
para que el equipo esté sereno y ordenado.
Guillermo Sanchez (5): Esta
vez le tocó arrancar desde el banco.
Cuando entró, tocó algunas buenas pelotas, entre ellas la que desembocó
en el segundo gol. Pero su conducta sigue
siendo su talón de Aquiles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario