miércoles, 30 de julio de 2014

Regresó al carril de la derrota: 0-4 contra el Anklam

El AW jugó con diez, perdió y quedó cerca de cerrar el peor torneo de su historia

Ya es reiterativo. Pero este torneo en el que, en el mejor de los casos, se puede aspirar a igualar la peor campaña del AW estuvo signado por una dificultad inocultable: la falta de jugadores. Otra vez se jugó con diez, se improvisó arquero y se cayó por goleada. Fue 0-4 ante el Anklam.
Igualmente, hay ciertos factores que, aún jugando con once, parecen difíciles de sobrellevar. En este caso, con el hombre de menos, se ven acentuados. Y el tema es el desconcierto en el que entra el equipo cuando le convierten. Pesa un poco el cansancio, claro. Gabi arrancó con todo. Pero siempre en desventaja numérica, esta vez se agotó antes. Y ahí comenzaron a aflorar las dificultades en la defensa. Los pelotazos surgían sin oposición y se le complicaba cubrir su espalda a Avillaneda. En algunas llegaron a cruzar Alejo o Piquín. Pero desde allí llegó el primer tanto. Pase al medio y definición. En esa, Luis hizo lo que tenía que hacer, aunque quedó muy expuesto. En el córner que vino después, no. El 1 de otrora volvió a hacer de las suyas. Calculó mal el salto para cortar el lanzamiento cerrado, pero cuando la pelota llegó, él estaba bajando y el puñetazo se metió adentro del arco. Para el tercer tanto, un gran pase del 11 delante de las narices de Avillaneda encontró desconcentrados a los centrales, que no llegaron a cerrar y el delantero rival definió. Durante ese primer tiempo, el juego en ofensiva se volcó más que nada por derecha. Y aunque no siempre resolvió bien, el encargado de generar alguna aproximación al arco de enfrente fue Tito. Un par de buenos pases dejaron a Nacho cerca del arco rival. Pero con varias dificultades a atravesar antes de poder estar de cara al gol.
En el segundo tiempo con menos piernas y más nerviosismo, cada ataque del rival era una situación de riesgo. Así y todo, no pudieron marcar mucho tantos. Entre algunas fallas en la definición y varias salvadas in extremis, el tanteador recién se movió a poco del final del partido. Los cambios de posiciones y las últimas exhalaciones consiguieron que se llegue a tres cuartos de campo rival con algo de peligro, pero la realidad es que el arquero rival casi no la tocó.
Quedan tres fechas para el final de un torneo que se extendió en tiempo como pocos y que la falta de continuidad le jugó una muy mala pasada al Auf Wiedersehen.

Luis Lasaga (3): Poco que hacer en el 1 er y 3er gol. Se mandó un puñetazo en contra en el segundo para hacernos recordad viejos tiempos en los que un tiro de 80 metros resultaba una situación riesgosa. Bien la actitud para calzarse los guantes ante la ausencia de Ale. Como delantero no tuvo mucho tiempo, pero tuvo un tiro al arco que definió afuera.

Ariel Pina (4): Siempre se mostró como salida y pocas veces lo pasaron. Formó buen tándem con Tito. En el segundo tiempo, con el equipo más expuesto sufrió un poco más y perdió un poco de órden. Así y todo tuvo un cruce fenomenal para evitar un gol.

Alejandro D'Aquila (4): Flojo partido. Tuvo algunas desatenciones y algunas pérdidas de marca. Esta vez no generó peligro ni en las pelotas paradas ni cuando fue de delantero. Sí hubo algunas quites con salidas lujosas. Se metió a discutir con el 8 innecesariamente.

Francisco Ingleson (4): Arrancó siendo el mejor de abajo. Cortó con intensidad a la espalda de Avillaneda y fue firme en las divididas cuando tuvo que salir lejos del área. Con el correr del partido se fue desconcentrando y terminó en un duelo con el 8 rival. Se salvó de la roja porque el árbitro no sabía qué hacer y por suerte decidió dejar a los dos en la cancha.

Ezequiel Avillaneda (3): Por distintos motivos no consigue continuidad en este torneo y se nota mucho. Lo atacaron permanentemente y los pasaron. En ofensiva no aportó. Cuando fue al arco no tuvo intervenciones y le metieron uno en un mano a mano.

Ernesto Rodríguez (5): Dentro del desorden que mostró el equipo, fue el que trató durante los 80 minutos de mantener su función. Se mostró siempre y llegó al fondo en un par de oportunidades. Colaboró en la marca y le dio una mano a Spina.

Gabriel Spina (4): Arrancó muy bien, marcando presencia en el medio. De a poco, el rival se vino encima y quedó en desventaja numérica. Al final fue perdiendo eficacia y no pudo ocupar su posición como corresponde.

Juan Abud (3): Es cierto que no estuvo muy bien abastecido y sufrió las dificultades de Avillaneda atrás, pero no apareció como nos tiene acostumbrados, ni con corridas ni con gambetas. La molestia en la rodilla lo tiene preocupado y no consigue concentración en el juego para no entrar en discusiones o en enojarse cuando no le salen las cosas.

Diego Castellani (4): Es el que más la pide y participa del juego. Varios buenos pases y movilidad por toda la cancha. Además, metido en el partido a pesar de la derrota, no se metió en ningún tumulto, no discutió con el árbitro y se dedicó a jugar.


Ignacio D'Aquila (5): Siempre parejo, en general le da buen destino a la pelota y se ofrece siempre para recibirla. Esta vez cayó mucho en offside (algunas mal cobradas) y no tuvo chances claras frente al arco. Cuando fue de dos, cumplió.

Cortó la racha de caídas: 2 a 2 con el Ozer

Con un gol polémico, el Auf Wiedersehen dejó escapar la primera victoria del torneo

En el torneo más malo del Auf, se dio quizás el partido más raro.  Un rival flojo,  un par de goles insólitos, y un empate ante un rival de jerarquía relativa.
El equipo arrancó bien parado y pudo ponerse en ventaja.  Pelotazo largo a Nacho que la dejó picar, aguantó al central con peso de nueve y asistió a Dieguito, que definió bajo y a un palo con clase.
Pero como en los últimos tiempos, en los que se pone en ventaja y no puede aguantar el resultado, llegó el empate rival en una jugada desafortunada: pelota en profundidad, Agus se queda pidiendo off side en lugar de marcar, Alejo intenta despejar con tanta mala suerte que le pega al rival y se mete para el empate.
Parecía que el curso del partido iba a seguir como en las últimas fechas, pero luego de otro pelotazo, que parecía ser para Nacho –que la dejó pasar porque estaba en fuera de juego-, Guille pudo dominar, esquivar al arquero cual Cani en el 90 (Brasil, decime qué se siente) y poner nuevamente en ventaja al equipo de la cruz.
La jugada del empate, que terminó siendo final en dos, fue con polémica.  El árbitro cobra “plancha” –jugada que por reglamento no existe, o es jugada peligrosa o foul, para este cronista fue esto último y por tanto tiro libre directo- pero no levanta la mano para que la jugada sea a dos toques.  El técnico rival se aviva y avisa al shoteador que le pegue al arco, cosa que hace, dejando a los centrales mirando cómo la pelota ingresaba mientra Ale la dejaba pasar.  Reclamos de un lado, fallo revertido, reclamos del otro, fallo revertido nuevamente, reconocimiento del error por parte del réferi y empate que fue definitivo.
Empate raro para un torneo definitivamente raro.

Alejandro Encisa (3): Sin respuestas en el primer gol y con definitiva responsabilidad en el segundo.

Agustín Tripaglia (4): Quizás el  partido más flojo de alguien que en general es de buen rendimiento.  Responsabilidad en el primer gol.

Alejandro D'Aquila (6): Buen partido del central.

Francisco Ingleson (5): Garra por un lado.  Falta de concentración por el otro.

Juan Gori (6): Lo de siempre.  Entrega todo el tiempo, despliegue mientras resiste el cuerpo.

Ezequiel Koren (5,5): Buen juego, pero todavía no logra ser determinante en ataque o en defensa.

Gabriel Spina (6): De los pocos cinco únicos de la liga, cuando, además de marcar, entra en juego, el equipo funciona.

Ernesto Rodríguez (5,5): En lo que parece ser su seguidilla más larga en mucho tiempo, va encontrando timing.

Diego Castellani (6,5): Después de mucho tiempo llegó al gol, además de intentar hacer jugar.  Las contras, las de siempre: la pelota perdida después de retener mucho, y su falta solidaridad en los aspectos extras del grupo (adentro y afuera de la cancha).

Ignacio D'Aquila (6): Determinante en las dos jugadas del gol, fue intermitente en su participación.

Guillermo Gardeazábal (6,5): Punzante para encarar, cada vez necesita entrar menos en juego para cambiar la ecuación.

Juan Abud (5): Volviendo de la lesión, nadie duda de su importancia, pero va a necesitar serenarse.

Martín Radics (3,5): Flojo en el fútbol, flojo en el resto.


Luis (4,5): Si a su falta de ritmo le suma falta de concentración, le va a costar encontrar su mejor versión.

jueves, 17 de julio de 2014

Nueva derrota: 1-2 frente al Real Oviedo

Caída decorosa del Auf Wiedersehen, que no llegó a completar los once jugadores

Crónica nueva, historia vieja.  El Auf Wiedersehen entró a la cancha con diez jugadores y –si la memoria de este cronista no falla- de las veces que se dio esa situación, sólo una vez consiguió un punto; el resto de las veces, fue derrota.  En esta ocasión no hubo excepción y siendo un equipo al que no le sobra nada, perdió por 2 a 1 ante el Real Oviedo, un econjunto muy limitado.
El partido empezó con toque y orden, con llegadas y buen ánimo.  Eso concluyó en la apertura del marcador por parte de los rayados. Gabi puso en cortada una pelota para una diagonal de Nacho del centro a la izquierda, que en un mano a mano con un rival se la llevó con lo justo.  Dentro del área grande y con el arquero de frente, la empaló de manera precisa para que entrara bien cerquita del travesaño.
 Y no se pasaban mayores sobresaltos ante un rival que demostraba sus limitaciones.  Pero sobre la hora del primer tiempo llegó una jugada de pelota parada, un buen salto y un cabezazo que pasó no tan lejos del arquero Aufi y fue empate.
Las cosas no iban a estar mejor.  En la primera parte del segundo tiempo, se dio un mal manejo de una jugada de ataque, pérdida y contra rápida, en la que Pikín hizo un esfuerzo grande por marcar al delantero que se iba sólo, lo movió bien con el cuerpo pero tuvo mala fortuna y la pelota le quedó mansita para que definiera a un palo.
Esto mostró la peor cara de algunos jugadores rayados, con quejas y poco compromiso.  El cimbronazo duró un rato, hasta que se acomodaron un poco los tantos y se fue a buscar decididamente el empate.  Con Cula de líbero y Agus y Pikín de stoppers,  el equipo contó con diversas chances de empatar.  Pero entre el cansancio y la mala fortuna, otra vez se le negó la posibilidad.
Nuevamente queda la ilusión pendiente en tanto y en cuanto se logre resolver problemas viejos como presencias y unidad en la mala.
  

Alejandro Encisa (4,5): El primer gol le pasa muy cerca, dejando la sensación de que podría haber hecho algo más.  Sacó una gran pelota que iba al ángulo, y en el segundo gol no tuvo chances.

Juan Gori (5): Socio fundador del Auf, diseñador del escudo, jugador emblema de una época, siempre reaparece cuando el equipo lo necesita.  Su rendimiento fue bueno en el primer tiempo, pero en el segundo la inactividad le pasó factura.

Alejandro D'Aquila (5,5): Cumplió con solvencia el rol de central como casi siempre, por más que su marca hizo el primer gol.  Perdió un gol en una pelota parada que el cataloga con “fácil”.  Después, con el equipo en desventaja se mostró siempre y tuvo en sus pies la más clarita sobre el final, a la que no llegó por un pelo.

Francisco Ingleson: (5,5): Buen partido del mariscal de la defensa, pasado de ser segundo marcador central, a primero, a stopper.  La jugada del segundo gol hubiese consagrado su espíritu y su entrega, pero la suerte no lo acompañó.

Agustín Tripaglia (6): Cada vez más brasilero, toma más trascendencia en la salida limpia del equipo por la banda que en la marca.  También gana presencia en su polifuncionalidad en todas las posiciones de la defensa.

Ernesto Rodríguez (4,5): Después de un gran partido, no pudo repetir una actuación destacada.  Participó poco y se lo vio impreciso.  Descontada su voluntad de hierro, se esperaron escaladas de él por la derecha que no llegaron.  Dio el mejor quite del partido.

Gabriel Spina (6): Teniendo que llevar a cabo la titánica tarea de ser el único cinco en un equipo con poca marca y uno menos, siempre tiene las de perder.  Así y todo, recupera mucho y trata de ser el que asegure la circulación.  Fue amonestado después de una seguidilla record de partidos.

Ignacio D'Aquila (7.5): Como volante por la izquierda, hizo un primer tiempo de 10-11, llegando hasta el final, como en la jugada del gol, de definición exquisita.  En el segundo tiempo, viendo al equipo en franco ataque, armó una línea de tres con el de líbero y desactivó no una, sino cuatro contras él solo.

Diego Castellani (5,5): Concentrado y de muy buena técnica, garantiza buena entrega y juego de ataque.  Pero su cabeza le juega una mala pasada y la impaciencia lo hace hacer una de más o perder pelotas que terminan en ataques rivales.  Para colmo, una vez más, se habló de mala manera con compañeros.


Luis (5): Ya había advertido al DT que estaba para veinte minutos.  Con el equipo en inferioridad numérica, no puede cumplir.  Si bien entregó algunas de sus corridas habituales, su poco rigor táctico hace que el equipo lo pierda la mayoría del partido.

miércoles, 16 de julio de 2014

Otra caída: esta vez ante el Lekue por 4 a 2

Tras mucho tiempo sin jugar, el AW se cansó y no pudo sostener la ventaja

El AW no es un equipo que se destaque por su condición física. Ninguno es un maratonista keniata, que tiene resistencia desde el primero al último eslabón de su ADN ni tampoco tenemos en el plantel a alguien que compense la carencia de aguante muscular innato con la disciplina japonesa. Así que salir ileso de un periodo de inactividad de mas de un mes es muy complicado. Principalmente por eso, el conjunto de Nacho D'Aquila cayó por 4-2 ante el Lekue.
Con la cancha pesada, parcialmente recuperada de la cantidad de diferentes lluvias que cayeron, el Olvidensen trató de arrancar jugando en campo contrario. Por el campo de juego, no pudo hacerlo mucho por abajo. Por eso recurrió al pelotazo. Muy mal no le fue. Más que nada por derecha llegaban los acercamientos al área rival. Más o menos desde ese sector partió el pase para Gardeazábal, que controló y definió por arriba del arquero. Apenas pudo festejar el tanto el equipo cruzado, que recibió el empate por una pelota sacada mal por el arquero, la cual recibió un rival y la clavó en el otro palo. Otro tiro desde afuera encontró, en este caso, la resistencia del 1 del AW, pero para el rebote reaccionó más rápido el delantero que El Mono y el resultado se dio vuelta. Sin llegar a asentarse en el terreno resbaladizo, la defensa blanca y azul siguió dando posibilidades al rival. Primero desbordaron a Avillaneda y mandaron el centro para el 1-3. Más tarde, un córner rebotó en Gabi y le quedó servida al delantero rival. Recién a partir de allí los cruzados levantaron el nivel. Y generaron bastantes situaciones de gol. Aunque parezca extraño, hasta pudieron empatarlo. Pegó Luis un tiro en el travesaño, erró Tito un mano a mano tras haber corrido 30 metros y estuvieron cerca Martín y Ezequiel. El Cóndor volvió a marcar en medio de esa arremetida aufwiedersehiana. Pero otra vez no alcanzó. Pero la alegría de volver a jugar después de tanto tiempo, pareció dejar en segundo plano la goleada en contra que se recibió.

Alejandro Encisa (3): Flaqueó en el primer gol, en el cual sacó rápido pero tardó en volver. En el resto de los tantos, quedaba poco por hacer. Tiró un pique en el que, para suerte del delantero, se acalambró.

Agustín Tripaglia (4): Bastante firme teniendo en cuenta el estado del campo de juego. Preciso con la pelota, casi siempre la dio al compañero y casi todos los ataques del primer tiempo arrancaron por su sector.

Alejandro D'Aquila (3,5): Bien en las divididas. Tranquilo en el primer tiempo. En el segundo, con el equipo más abierto, se destacó en el mano a mano y en algunas salidas lujosas. Sin tanta presencia en el juego aéreo.

Francisco Ingleson (4,5): Controló bastante en el PT y después se le complicó algo más. Con el equipo mucho más arriba, quedó expuesto y perdió algún que otro mano a mano.

Ezequiel Avillaneda (4): Falto de ritmo, no lo atacaron tanto en el PT y aprobó. En el segundo reaccionaron antes que él y en el tercero lo desbordaron.

Ezequiel Koren (4,5): Bastante participativo al comienzo, fue de lo más profundo del equipo. La pidió y le cometieron varias faltas. En el final del partido fue de 5 y trató de generar peligro mandando pelotazos al área.

Gabriel Spina (5): Fue lo mejor del equipo en los primeros 15 minutos. Recuperó, entregó bien y marcó presencia en el medio. Con el correr del partido, la cancha pesada y el desorden en el que fue entrando el equipo se fue desdibujando.

Ernesto Rodríguez (4,5): Siempre ordenado tácticamente y con un despliegue enorme, esta vez le agregó sorpresa al ataque. Sigue con su mala puntería: tuvo una corrida memorable y le pegó por arriba en una de las más claras del partido.

Ignacio D'Aquila (5,5): Algún que otro toque en el comienzo y la picardía de siempre para no perder la pelota. Uno de los que más sintió la inactividad y que se fue quedando con el correr de los minutos.

Martín Radics (4,5): Buenas combinaciones con Nacho en el toque corto. El pase al Cóndor del primer gol y bastante movilidad en el primer tiempo. Bajó la intensidad en el segundo, pero siguió siendo importante.

Guillermo Gardeazábal (7,5): De una vez por todas pudo picarla y poner en ventaja al equipo. Fue lo más movedizo arriba y lo más eficaz, ya que también marcó el segundo.

Luis Lasaga (5): Cuando entra de suplente rinde más. Saca más ventaja al rival en lo físico y por eso mentalmente se fortalece. Así generó peligro y fue alternativa de ataque. Clavó un tiro tremendo en el travesaño.

Diego Castellani (4): Entró con entusiasmo y las pidió todas. Algunas resolvió bien y otras no tanto. Siempre estuvo lejos del arco rival.